Muchas veces las prisas, el poco tiempo y la dejadez son los culpables de que no se realicen estiramientos antes o después del ejercicio. Los estiramientos favorecen y permiten tener los músculos en buena forma. Gracias a los estiramientos podremos notar nuestros músculos más preparados para afrontar correctamente el ejercicio y los podremos relajar al finalizar la actividad física.