Todos estamos de acuerdo en que practicar cualquier tipo de deporte al
aire libre es bueno, ya que nos hace entrar en contacto con la
naturaleza y nos devuelve en cierto sentido esa parte animal que
llevamos dentro, ese elixir perdido por la rutina y por la
industrialización de nuestras ciudades y de nuestras vidas. Pero los deportes extremos tienen muchos beneficios, o más bien, cosas importantes que los hacen atrayentes.