Cuando comenzamos a hacer un ejercicio físico al que no estamos acostumbrados, aparecen las agujetas, ese dolor muscular que hace que moverse sea costoso e incluso doloroso.
La mialgia diferida (agujetas) pueden aparecer debido a micro roturas de fibras musculares, temperatura incrementada localmente en los músculos o a causa de la acumulación de ácido láctico. Para prevenir las agujetas no existe un método fiable que le funcione a todo el mundo, pero es cierto que los estiramientos musculares previos y posteriores al ejercicio ayudan a que disminuya la intensidad del dolor, también es beneficioso el calentamiento y una ducha fría al finalizar la actividad física. Si con todo lo realizado anteriormente seguimos teniendo agujetas, el método más empleado para tratarlas es a través de masajes musculares. Otra idea es aplicar frío en la zona afectada o, si el dolor es muy intenso, tomar analgésicos.
