Beber agua con azúcar para reducir las agujetas es un falso mito. Según Brian Udermann, actualmente investigador en el Departamento de Ciencias del Deporte de la Universidad de Wisconsin, explica a la revista ''muy interesante'' que las agujetas que aparecen después del deporte se deben a un daño muscular muy pequeño, y no a la formación del ácido láctico como mucha gente cree, por lo tanto tampoco es cierto que desaparezcan bebiendo agua con azúcar. Según ha comprobado el investigador, solo hay dos cosas que parecen prevenir mínimamente las agujetas: los estiramientos suaves y practicar actividad física ligera tras hacer un ejercicio intenso, por ejemplo dando un paseo.