Tres meses en Madrid y toda la ilusión del mundo puesta en su máster en Museología. Así amaneció ese miércoles 21 de octubre de hace poco más de un año para Julián Baena, sin la más mínima sospecha del parón que iba a experimentar su vida. Estaba en la biblioteca de la Universidad Autónoma y a las dos de la tarde aparcó los libros momentáneamente para ir a comer.