Hoy en día ya están presentes en nuestras vidas cantidad de wearables destinados a la mejora o el
control de nuestro estado de salud. Parece que hablamos de ciencia ficción,
pero la verdad es que estos artilugios son el futuro de la medicina, encontrando
desde teléfonos inteligentes hasta tatuajes que informan sobre la temperatura, frecuencia
cardíaca o presión arterial. El futuro está en la piel; numerosas empresas
apuestan por usar los tatuajes para un fin deportivo y médico y por ello, son
muchos los estudios que se han puesto en marcha para poder incorporar esta
tecnología en nuestro día a día.